La evolución del mercado y los cambios en los hábitos de los consumidores han acelerado la transformación de las compañías, sobre todo pasando por un proceso de actualización y digitalización de sus procesos. Ya se han establecido tendencias y prácticas como el teletrabajo, el trabajo en equipo a distancia y, en general, la flexibilidad a la hora de llevar a cabo los proyectos.

Este nuevo paradigma exige una buena gestión de los recursos y una nueva comunicación en un entorno colaborativo que mejore la satisfacción del cliente y la eficiencia de los empleados. Pero colaborar no es solo trabajar en equipo, también significa intercambiar ideas e información para generar resultados y propuestas más valiosas. Por eso es necesario fomentar la colaboración y reinventar la productividad.

Conectar todos los entornos

Las distancias no deben ser un impedimento entre los equipos. Gracias a las plataformas en la nube, la empresa puede colaborar e intercambiar información valiosa desde cualquier dispositivo y desde cualquier lugar. Es fácil de utilizar, ágil, personalizable, accesible y, sobre todo, seguro.

Terminar con la rigidez

Las empresas son ecosistemas en continua evolución. En unas ocasiones crecen y en otras se repliegan a la espera de nuevas oportunidades. Pero siempre necesitan que su entorno y sus recursos (administrativos, tecnológicos, humanos, financieros, etc.) se adapten a las circunstancias.

Facilitar la autonomía personal

Tener la capacidad para trabajar de manera autosuficiente ayuda a depender lo menos posible de otros. Este aspecto está muy relacionado con la sencillez. En la medida en que nuestros recursos sean accesibles para perfiles con diverso grado de especialización, habremos logrado este tipo de autonomía. Por ejemplo, crear una presentación interactiva sin necesidad de consultar a un técnico.

Simplificar y automatizar los procesos

Suprimir la duplicidad de tareas, gestionar el trabajo desde un único entorno centralizado y disponer de una visión global del estado del negocio. Esto proporciona a las compañías una visibilidad completa de cada proceso y de la evolución de cada área de la empresa, lo que les permite tener más datos y, por ende, tomar mejores decisiones.

Fomentar los espacios de debate

Disponer de espacios físicos o virtuales para debatir y compartir ideas es muy beneficioso para fomentar la colaboración de los empleados y su implicación corporativa. Una de las maneras de lograrlo es abrir nuevos temas de discusión sobre los que todos los empleados puedan aprender o se puedan desarrollar nuevas ideas.