Cada año las soluciones en la nube ganan terreno a las originales soluciones de escritorio. Office 2016, la última versión local de la suite de ofimática de Microsoft, da paso a su sucesor en la nube Office 365. Se trata de una solución que además de las clásicas herramientas Word, Power Point y Excel incluye otras muchas aplicaciones que lo convierten en una completa plataforma 360 para el trabajo diario en oficina.

Frente a la solución de Microsoft, encontramos el G-suite de Google que cuenta con soluciones alternativas para hacer hojas de cálculo, presentaciones y documentos además de otras aplicaciones y extensiones que amplían sus posibilidades. Tanto Office 365 como G-Suite ofrecen servicios de correo electrónico corporativo, chat y videoconferencia para ofrecer una solución integral a las empresas. Ambas son soluciones que compiten en un mismo mercado con características similares, pero también con grandes diferencias.

A continuación, analizamos los puntos clave a tener en cuenta antes de decidir cuál es mejor para tu empresa.

Crear, editar y compartir documentos

Estableciendo la comparación entre la opción Basic de Google y Business Essentials, el plan más básico de Microsoft, haremos un análisis de las funcionalidades más relevantes. Office 365 ofrece una versión online de Word, Excel y Power Point además de la versión de escritorio de Office 2016. Las versiones en la nube de las aplicaciones de Office son más sencillas que las de la versión de escritorio. Sin embargo, son muy competitivas frente a Google Suite.

[bctt tweet=”Las aplicaciones de #Office365 son muy competitivas frente a Google Suite” username=”ProdwareES”]

Sheets es una solución muy interesante pero que todavía no le planta cara a Excel. Por su parte, Docs y Presentations, aunque muy prácticas y funcionales, no permiten grandes ajustes de personalización y diseño, al contrario que Power Point y Word. Una ventaja de las aplicaciones de GSuite es que permiten la descarga de los documentos en formato Microsoft. Sin embargo, en documentos un poco más complejos, el formato se desvirtúa o no es posible abrirlo.

Almacenamiento

Una de las grandes apuestas de Microsoft es el almacenamiento en la nube. Por ello incluye en todos los planes de Office 365 1T de almacenamiento además de 50 gb de correo. Esta capacidad suple la mayor parte de las necesidades de empresas de pequeño y mediano tamaño, lo que evita tener que contratar servidores aparte para la gestión de archivos.

La ventaja G Suite es que ofrece de forma gratuita hasta 10 gb de almacenamiento, una estrategia de captación muy interesante ya que con su plan Basic el almacenamiento asciende a 30 gb. No obstante, todavía se encuentra muy lejos del tera que ofrece Office 365 y que cubre mejor las necesidades de pequeñas empresas.

Chat y videoconferencia

Hangouts Google ofrece una potente solución de videoconferencias con una calidad buena y un servicio de mensajería instantánea al que poder acceder directamente desde el correo electrónico. Por su parte, Office 365 incluye la versión empresarial de Skype con llamadas a fijos, HD y videoconferencias de hasta 250 personas, un volumen mucho mayor que las 25 que permite hangouts.

Seguridad

La nube de Microsoft, y por tanto Office 365, garantiza el cumplimiento de la Ley de Protección de Datos además de los más estrictos protocolos de seguridad a nivel mundial. En los últimos años la compañía ha centrado sus esfuerzos en este ámbito para garantizar la confianza en la nube. En cambio, Google no garantiza el cumplimiento de estos protocolos. Cuenta con seguridad y protección estándar, pero sin un compromiso oficial ni garantías. Además,

Ambas soluciones son funcionales y ofrecen grandes posibilidades a los usuarios. Sin embargo, tanto en almacenamiento como en complejidad, las soluciones de Microsoft siguen jugando con ventaja al ser mucho más completas y funcionales que las de G Suite. Además, Office 365 ofrece una multitud de aplicaciones de colaboración y productividad que complementan a las herramientas básicas de trabajo, para ofrecer nuevas formas de gestión más eficientes.