Entendemos por mantenimiento predictivo aquellas técnicas y procesos que nos permiten determinar las condiciones del funcionamiento y de servicio de equipos en un futuro cercano para predecir cuándo deben realizarse acciones de mantenimiento antes de que se produzca una incidencia, un fallo o una rotura. Es decir, conocer las condiciones a las que está trabajando ese equipo nos permitirá realizar un diagnóstico de su funcionamiento.

El mantenimiento predictivo reduce los costes operativos y ayuda a satisfacer a los clientes gracias al uso de tecnologías de analítica avanzada y servicios cognitivos. Genera ahorros de hasta un 20% en costes operativos al prevenir posibles averías y predecir fallos antes de que ocurran y al racionalizar el uso de recursos, que se limita a aquellos casos imprescindibles. Además, permite reducir los costes por desplazamiento de equipos, así como las acciones de reparación, las segundas visitas y los tiempos de parada. Se trata de una forma de rentabilizar los servicios de campo.

[bctt tweet=”El mantenimiento predictivo ahorra hasta un 20% en costes operativos al prevenir posibles averías” username=”ProdwareES”]

Todo el plan de mantenimiento debe basarse en una recogida de datos a partir de la monitorización de una serie de parámetros y condiciones de funcionamiento del equipo que estemos estudiando. Se pueden monitorizar todo tipo de aparatos, desde un molino de viento a una catenaria, una turbina o cualquier equipo en una línea de producción. Además, las nuevas tecnologías permiten llevar a cabo un seguimiento en tiempo real de todos estos parámetros.

Podemos medir dos tipos de variables:

  • Datos internos específicos del propio equipo y de su funcionamiento: las horas, la presión y los caudales a los que trabaja, el voltaje, el calentamiento de los componentes, etc.
  • Datos externos que pueden condicionar también el trabajo que realiza: temperatura ambiente y humedad del entorno, vibraciones a las que esté sometido por el tipo de trabajo que hace, desplazamientos del equipo.

¿Cómo llegamos hasta el mantenimiento predictivo? Existen cuatro niveles antes de llegar al modelo predictivo:

1. Mantenimiento Correctivo

Se refiere el conjunto de acciones ejecutadas para a corregir incidencias que van presentándose. Es completamente reactivo, la acción se lleva a cabo una vez que se ha producido la incidencia. A partir de ahí los usuarios informan al departamento de mantenimiento que diagnostica las causas y trata de buscar soluciones. Este nivel de mantenimiento no permite actuar de manera proactiva antes de que se produzca el fallo.

2. Mantenimiento Preventivo

Su objetivo es mantener un nivel de servicio determinado en los equipos mediante la planificación de acciones de mantenimiento orientadas a evitar que se produzcan incidencias y fallos. Para ello, utilizan información basada en el histórico de funcionamiento del aparato y en sus características.

Las intervenciones se programan de manera sistemática, aunque el equipo no haya dado ningún síntoma de fallo, y se centran especialmente sobre aquellos componentes más vulnerables. Este tipo de mantenimiento permite ampliar el tiempo de funcionamiento de los equipos en las condiciones apropiadas y ayuda a evitar o reducir las paradas inesperadas.

3. Mantenimiento Basado en las condiciones

A partir de la monitorización del funcionamiento de los equipos, del diagnóstico realizado a partir de las acciones correctivas o de las preventivas y en base a las condiciones en las que trabaja el aparato, de su entorno, de su utilización o de su patrón de funcionamiento, podemos realizar, planificar, adelantar o atrasar las intervenciones de mantenimiento. Estas acciones podrían programarse o ejecutarse en tiempo real mediante el uso de sensores que detectan niveles anómalos y envían una señal para iniciar el protocolo de mantenimiento concreto en cada caso.

4. Mantenimiento Predictivo

Este tipo de mantenimiento es capaz de predecir cuándo van a producirse averías y solucionarlas antes de que sucedan. En base a toda la información recogida, a las condiciones de funcionamiento y a las acciones realizadas previamente, el sistema detecta fallos potenciales y actúa de acuerdo a un conjunto de acciones previas diseñado para evitar que ocurran las incidencias.

Busca conocer en tiempo real y permanente el estado y la capacidad de funcionamiento de las instalaciones. Para ello, identifica y mide múltiples parámetros representativos que ayudan a describir ese estado general y cuya variación pueda indicar potenciales problemas para el equipo. Esto ayuda a mejorar la eficiencia de los equipos de producción.

5. Mantenimiento Prescriptivo

Se trata de la evolución de mantenimiento predictivo. Basado en ese modelo y en la posibilidad de detectar una posible rotura en un momento determinado, en la fiabilidad del producto o las condiciones de trabajo, el sistema detecta desviaciones en los parámetros normales y propone acciones correctoras. Este es el tipo de mantenimiento más avanzado tecnológicamente y que mejor puede satisfacer al cliente. Utiliza recursos innovadores de sensorización, inteligencia artificial, analítica predictiva, aprendizaje automático, etc.


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